El Metamodernismo es un movimiento artístico de absoluta actualidad. Metamodernismo es decencia, ética, integridad, honestidad, verdad... Metamodernismo es oscilación y tecnología digital. Pero Metamodernismo es también apropiación de todo aquello del pasado que valga la pena(1). Es la revolución contra el Posmodernismo, que ha sido el imperio de la chanza, de la mentira y del todo vale. Pero también de las patentes, la globalización y los derechos de autor.
Primera consecuencia: la juventud está fuera de onda, y no por primera vez. O corre, o se queda fuera del progreso intelectual y moral. Sin embargo, se les espera. Los realmente jóvenes se acercan a la verdad... Redes sociales como Snapchat(2) son decencia en estado puro: "No tengo nada que decir, de momento, pero estoy aprendiendo y cambiando cada día. Por lo tanto, no quiero que quede ningún recuerdo de cómo fui ayer. No me comprometo con ninguna idea hasta que conozca el mundo real".
El Posmodernismo ha terminado. Basado en mentiras como la bomba atómica o la holofalacia, dio lugar a una forma de pensamiento nihilista absolutamente negativo. Ante la perspectiva de la muerte merecida (todos los occidentales éramos asesinos de inocentes), todo valía. "A disfrutar, que son cuatro días". Tiempos de yuppies y de porqueyolovalguismo randiano.
Se acabó.
El primer presidente metamoderno no ha sido Trump, aunque Trump lo sea, sino Putin. Pero no será el último: las elecciones en Holanda, Francia, Austria y otros países avanzados van a dar que hablar. Sobre todo a los medios cautivos del mal, y a sus serviles enanitos cabezones.
Por supuesto, los restos del posmodernismo, caducos, muertos, acusan de fascistas a Trump, a Putin y a todos los futuros presidentes de las naciones que renacen de sus cenizas. No debe extrañarnos. Los financiadores de los medios (prensa, radio, televisión, cine, arte, teatro y demás mierda mediática) conocen la falsedad de las causas que crearon el posmodernismo. Son, de hecho, sus inventores.
¿Sabéis de qué hablo? De "obras de arte" como éstas:
Basura absoluta que no vale ni el material del que está hecha, pero que los marchantes venden a ciertos idiotas que, agradecidos al Posmodernismo que los hizo ricos, gastan fortunas en auténtica mierda. ¡Y esperan hacer un buen negocio porque cada día nacen muchos más idiotas que se hacen ricos y quieren comprar mierda posmodernista!
De Duchamp a Hirst, pasando por Warhol, Bastiat, Pollock, Lichtenstein, Rothko, Koons, todo basura a costo astronómico. Los precursores fueron los dadaístas, Duchamp y su retrete industrial carísimo al frente.
Y hablo de mentiras como éstas:
La hecatombe pseudocientífica de la Relatividad einsteniana marcó el camino hacia el relativismo moral. Siguieron las dualidades cuánticas, los universos paralelos y otras sandeces que guiaron al mundo hacia el "Todo vale; en alguna otra realidad seguro que es legal".
El Arte siempre precede a las ideas sociales. Los artistas son así, tienen un sexto sentido para hacer lo que toca hacer. El metamodernismo lleva progresando desde el cambio de siglo. Los artistas metamodernos han vencido dificultades monumentales. El sistema los ha ninguneado y, por si fuera poco, los artistas son desconocedores de los fraudes que los han impulsado a ponerlo todo patas arriba. Nada saben de la ineficiencia de las bombas A y H o de holofalacias. El impulso ha sido absolutamente espontáneo como reacción al absurdo, a la injusticia, al ridículo de un sistema que encumbra a los idiotas que no tienen nada que decir. Porque el sistema premia el que no se diga nada verdadero hasta ese ridículo punto, con tal de encubrir las falacias en las que fundamente sus "valores universales" incontestables. Mientras, eso sí, mutila salvajemente a sus neonatos o se niega a comer la carne de un animal que no haya sido completamente desangrado en presencia de un sacerdote. Posmoderno, ¿a que sí? A tope de posmoderno...
Los necios también intuyen buena parte del pastel. Intuyen que si argumentan con tópicos más manoseados que el coño de una dama de la noche, el sistema los premiará. Aunque cada vez los premia menos, la verdad: un sueldo fijo quizás. Porque la mentira cuesta cada día más sostenerla, hacen falta hordas de lacayos, coros completos de enanos intelectuales que la ensalcen cada día. Y los recursos son limitados. Y los que pagan son tacaños hasta la miseria.
En fin, ahora toca enseñaros verdaderas obras de arte metamoderno actuales:
Probablemente, acostumbrados a la mierda que os han vendido durante cien años, no veáis diferencia. Pero la hay.
¿Acaso no os dais cuenta de que todas lanzan un mensaje al espectador? "Piensa. Rebélate. Activa tus neuronas para derribar el Imperio de la Mentira". Sin traidor progresismo barato, sin cinismo, sin falacias.
En ciencia, recientes experimentos demuestran que la velocidad de la luz no es un invariante y que hay partículas más rápidas que la luz. Los ingenieros lo saben desde hace mucho tiempo, porque fueron los responsables de poner en marcha los satélites GPS. Pero se callan porque quieren seguir cobrando a fin de mes.
¿Y en política? Pues lo mismo: la verdad ante todo. El sentimiento natural del hombre sin cortapisas, sin vergüenza de ser hombre. La Tercera República Constitucional de Trevijano, un anciano que seguramente ignora lo muy metamoderno que es. Ojalá viva muchos años.
Termino aquí, no sin invitaros a leer más sobre Metamodernismo.
Y otra cosa, lector... Te aviso: Si este post no te llega, simplemente suicídate.
Un saludo.
UN ÁCRATA METAMODERNO,
(COMO TODOS LOS ÁCRATAS
HABIDOS Y POR HABER)
(1) El único colaborador de acratas.net verdaderamente metamoderno fue Javier Castuera, alias Peter Pank. Pero Mess no supo verlo. Lo digo claro y no creo que Mess me corrija. La consecuencia de esta faceta del Metamodernismo han sido las redes de descargas de música y películas. Kim Dotcom por poco acaba en la cárcel. Pero el Metamodernismo es imparable. Se pongan como se pongan.
(2) Snapchat, la red social en la que todo es efímero, dura segundos.
217 COMENTARIOS:
«El más antiguo ‹Más antiguo 201 – 217 de 217 Más reciente› El más reciente»Y esto, queridos amigos, es lo que teneis que hacer si no quereis ser acratas.
Mas claro el agua bendita.
Vosotros seguir a lo vuestro, que yo, como siempre, sigo a lo mio.
Y al que no me siga, lo siento. Y al que me siga, tambien lo siento.
https://youtu.be/_kDh2ZgDyOU
Esto tiene pinta de alargarse. A veces los deseos se hacen realidad.
Te gusta que lo que era un pasatiempo se convierta en una obligacion? Adelante!
Nihilismo querias, y nihilismo vas a tener.
Y es que no hay nada como hablar con uno mismo, en esta selva de buitres.
Y mas lo siento por los que no voy a nombrar. Ellos lo saben. Me resbalan sus impertinencias.
https://youtu.be/1vaEjIFDACc
Estais en la siguiente pagina. La que no os atrevisteis a cruzar. No es mi problema que os guste el pienso masticado.
ONCE el numero magico.
Y como yo creo en el libre albredio me va a tocar el 13. Eso si, siempre detras del doce.
Albredio he dicho? Como me pille Moncho me canea.
Sin desperdicio el artículo de Meyssan que ilustra el deterioro moral del vecino frances http://www.voltairenet.org/article196101.html
La crítica que plantea el artículo es brutal.
Le faltan algunos conceptos: explicar el porqué del éxito de Koons, Hirst y demás.
La explicación es de movimiento de capitales sin control.
¿A alguien le extraña?
Salud.
“Si los romanos iban al Coliseo a ver sangre, los new yorkers van a Phillips para ver dinero” dice Simon de Pury ex dueño y fundador de la casa de subastas Phillips de Pury en su libro de memorias The Actioneer, editado por St. Martin’s Press, New York, 2016. Las subastas y los precios han distorsionado la compra y venta del arte, lo que se adquiere va más allá de la obra, es valor social, presencia mediática, sostener una puja es un duelo público por la nominación de millonario. Simon de Pury con el descaro de un suizo que trafica arte en New York cuenta su trayectoria con tanta satisfacción que cae en revelaciones que ponen en su sitio el mercado del arte.
Con la autoridad de un insider da un golpe a los historiadores y académicos del arte afirmando que el concepto de “arte contemporáneo” lo estableció Christie’s con las obras creadas desde los años setentas hasta la fecha para vender más, y que ellos deciden a quiénes deben anunciar como los “grandes maestros actuales”, no hay un análisis de los valores conceptuales de la obra, es una decisión comercial, buscan artistas que produzcan mucho y rápido porque entre más obra, más negocio. Los maestros Impresionistas y anteriores son difíciles de encontrar, lo poco que hay no da para que sobrevivan las casas de subastas, así que lanzan a sus propios valores en sinergia con los museos, porque ¡oh sorpresa! los directivos han sido empleados de los subastadores. Eso coincide con las últimas subastas de la obra de Basquiat que lo anuncian como “el Van Gogh contemporáneo”. Destroza el misterio del avaluó de la obra, esa demiurga resolución que parece exclusiva de un grupo: lo compran si cuesta más de un millón de dólares. Tal cual, nada de que la trayectoria, el contenido y la implicación en el arte, es manipulación de lo que significa ser rico y eso es tener un millón cash. Hace énfasis en lo fácil que es adquirir fama comprando una obra contemporánea VIP en subasta, y que eso cautiva a los ricos que aspiran ser conocidos por gastar su dinero. Simon de Pury fue director de Sotheby´s Europa, trabajó en las casas más importantes de Suiza, está en el centro de venta más grande del mundo, y tiene su propia casa de subastas Pury de Pury, si habla así es porque no teme quedar mal con sus clientes, asume que ellos saben que en los negocios todo es válido, sin embargo el arte tiene un lugar aparte, da prestigio.
En arte sois expertos. Está claro. Pero el arte tiene detrás a la política. Ah, que ya lo sabéis.
Ejemplo, el arte conceptual subvencionado que permite que personajes sin ninguna técnica y con mucha cara se consideren artistas por poner doce cubos de fregar blancos, rojos y verdes con más o menos agua y digan que representa a México y sus lagunas y sea una denuncia por el cambio climático. La única denuncia es sobre la nulidad de la artista que vive del dinero público, siempre apoyando a los políticos y sus memes sin jamás contravenir sus intereses.
Y el arte es un negocio de marchantes y galeristas y casa de subastas. Y le llaman arte a cualquier cosa que les dé dinero.
Fue Cela el que dijo eso de que novela es un conjunto de palabras encuadernadas de mayor o menor extensión en cuya portada pueda escribirse la palabra novela. Pues arte es cualquier sustancia material o inmaterial que sea susceptible de ser vendida a alguien como arte por una comisión.
Espero que haya más artículos sobre arte en ácratas. Estaré muy atento.
La finalidad del ser humano es convivir de la mejor manera. Seguro que busgosu me apoya.
La metamodernidad es la visión del hombre que supera (metá-) la consecuencia de la modernidad, que fue la posmodernidad debida al desencanto, y que nos aporta otra visión más valiosa del hombre, en la que se comprende que la finalidad de la existencia es vivir éticamente con los otros. A este fin deben quedar supeditadas todas las funciones de la vida.
Ética compleja para realizarse y convivir, auto-realización basada en los valores de equidad, igualdad, libertad, paz, fraternidad, comunidad. Dialogar y expandir, en vez de imponer. Lo nuevo requiere equilibrio y madurez para acertar a salir de lo establecido, pero al mismo tiempo no quedar dogmáticamente iluminado por modas más o menos inconsistentes que en algunos momentos puedan ofertarse en un horizonte poco contrastado y superficialmente analizado.
El Arte es el último reducto de la Verdad. Por eso ha estado tan invadido por la mentira posmoderna desde el fin de la II Guerra Mundial. Su precedente fue el dadaísmo, consecuencia del desencanto tras la I GM.
En el Arte, la Verdad brilla.
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