Se rumorea que el PSOE, en Ferraz, estudia proponer en su programa electoral una segunda vuelta para la elección del Presidente del Gobierno por sufragio de todos los españoles. Esa segunda vuelta se produciría el siguiente domingo tras las Elecciones Legislativas entre los candidatos de las dos formaciones más votadas en los comicios al Congreso.
Saben los socialistas que la propuesta les costará un enfrentamiento con sus actuales socios de coalición en gobiernos autonómicos, comunistas e independentistas, que se quedan con esta medida sin posibilidades de pactar cargos y competencias a cambio de apoyo en la investidura del Presidente en el Congreso. Pero ningún partido puede enfrentarse al derecho de los ciudadanos, aunque vaya contra sus intereses particulares.
Ya ha trascendido a todos los medios la propuesta previa del PP de que sea el partido más votado el que se alce con la Presidencia de forma automática, medida que conduce al bipartidismo en las cámaras legislativas. En efecto, sabiendo que se trata de unas verdaderas Presidenciales, el votante se ve compelido a votar a uno de los dos únicos que tienen opciones de gobernar, arruinando la representación en el Legislativo de los partidos minoritarios. En cambio, el procedimiento de doble vuelta permite separar el voto: en primera vuelta, al partido preferido para legislar; y en segunda, al presidente más adecuado de entre los dos con opciones.
Dicen los expertos que la segunda vuelta será una medida que independizará los poderes Ejecutivo y Legislativo, y ello traerá transparencia a la política nacional. La propuesta ya ha llegado a la ciudadanía, que mira expectante hacia la sede de del PSOE en Ferraz.
Saben los socialistas que la propuesta les costará un enfrentamiento con sus actuales socios de coalición en gobiernos autonómicos, comunistas e independentistas, que se quedan con esta medida sin posibilidades de pactar cargos y competencias a cambio de apoyo en la investidura del Presidente en el Congreso. Pero ningún partido puede enfrentarse al derecho de los ciudadanos, aunque vaya contra sus intereses particulares.
Ya ha trascendido a todos los medios la propuesta previa del PP de que sea el partido más votado el que se alce con la Presidencia de forma automática, medida que conduce al bipartidismo en las cámaras legislativas. En efecto, sabiendo que se trata de unas verdaderas Presidenciales, el votante se ve compelido a votar a uno de los dos únicos que tienen opciones de gobernar, arruinando la representación en el Legislativo de los partidos minoritarios. En cambio, el procedimiento de doble vuelta permite separar el voto: en primera vuelta, al partido preferido para legislar; y en segunda, al presidente más adecuado de entre los dos con opciones.
Dicen los expertos que la segunda vuelta será una medida que independizará los poderes Ejecutivo y Legislativo, y ello traerá transparencia a la política nacional. La propuesta ya ha llegado a la ciudadanía, que mira expectante hacia la sede de del PSOE en Ferraz.
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