MULTIVERSO

“La vida, según nuestro razonamiento, es una imperfección natural transitoria de ciertos lugares, escasísimos, del Universo provocada por la que señalamos más arriba como secuela de la enfermedad gravitatoria del Universo: la radiactividad.”, dice en su artículo EL SÚPER HOMBRE Y EL UNIVERSO, el profesor Uña de Quintana. En su original teoría, y a
diferencia de las tesis filosóficas, religiosas, biológicas, etc, imperantes, que consideran la vida como el summun de perfección que corona todos los procesos existentes en el Universo, la perfección sería precisamente todo lo contrario:

“,,,la excelencia sea un universo en el que las partículas estén infinitamente separadas unas de otras, sin interaccionar entre sí, a –273ºC, cero absoluto”.

Reposo absoluto, la quietud, el final de todos los procesos fisico-quimicos, Y a esa suma perfección llegaremos (¿...?) inexorablemente cuando se cumpla totalmente la Segunda Ley de la Termodinámica. El aumento continuo de la entropía, nos llevará a ese “soñado” y, a mi juicio, pesimista final del profesor Uña de Quintana. Tras el inicial Big-Bang con que todo comenzó hace unos quince mil millones de años, más o menos, dentro de otro período mas bien largo, (pero nada: un relámpago en la Eternidad), de, digamos, otros doscientos mi millones, habremos llegado a la meta: las galaxias, sistemas estelares, planetas ...toda la materia del Universo en continua expansión, se habrá enfriado y desagregado quedando únicamente una casi infinita “nube” de partículas subatómicas oscuras, frías, sin nexo alguno entre ellas, sin luz, sin movimiento ni vibración, sin fuerza gravitatoria. La infinita quietud a –273º . El Nirvana final. Fin de la Historia.

Esto es lo que inexorablemente debe ocurrir, conforme a la segunda Ley o Principio de la Termodinámica. “En un sistema cerrado, ningún proceso puede ocurrir sin que de él resulte un incremento de la entropía total del sistema”. Y el aumento continuo de ésta, deber llevarnos a ese final descrito, pues en puridad, el único sistema cerrado, solo puede ser el Universo entero. Todos los sistemas contenidos en el Universo, son “abiertos” respecto al mismo.

Ahora bien, ¿es ciertamente es el Universo un sistema cerrado?. Si aceptamos que TODO comenzó en el big-bang, que toda la materia y energía, estaba concentrada en un volumen finito, hace un tiempo finito de algunos miles de millones de años, lógicamente TODO lo que existe, sean súper cúmulos galácticos, galaxias, sistemas estelares... y eventualmente planetas, debe ser asimismo finito en espacio y tiempo. Y en tal caso el Universo será un sistema cerrado, sea cual sea la velocidad de la expansión y separación entre si, de todas las galaxias

Pero ¿y si todo lo que se describe como tal , no fuera más que un simple “Universo burbuja local” o “burbuja de ....Multiverso” , siendo éste a su vez infinito en tiempo, espacio y materia? . Cabe “pensar”, elucubrar o intuir (no se si otros vocablos o conceptos podrían definir mejor lo que quiero decir), que estamos inmersos en una simple “burbujita” que a nosotros nos parece muy grande, tan grande como a una bacteria deberá “parecerle” su universo formado por el cuerpo de cualquier individuo que la contenga. Pero ese “universo” bacteriano, es un solo y pequeño individuo, tal como puede ser eso que ahora que llamamos Universo y puede que no sea mas que una parte ínfima del Multiverso o el Todo.

En tal caso, en un Multiverso infinito, en que las “burbujas de Universo” pudieran ser a su vez infinitas en su número, y tal vez, interactuar entre si, no cabría hablar de “sistema cerrado” donde se cumpliera de forma inexorable e implacable la entropía con respecto al Todo. Porque para ello, el Todo, habría de ser, finito en tiempo, espacio y materia, es decir otra vez un sistema cerrado.

Más aún: cabe suponer que las leyes de la termodinámica y todas las leyes de la Física conocida, validas para nuestro Universo-burbuja, pudieran ser otras totalmente distintas en otros extraños y elejados lugares del Multiverso . ¿Quien nos dice que en tales exóticos parajes las leyes físicas, o ultra-físicas, en vez de tender a la entropía, no llevan desde un inicial desorden entrópico al orden final en sentido inverso al que conocemos’. En alguno de ellos, las agujas del reloj señalarán el tiempo inverso, corriendo hacia atrás, y los fragmentos de cristal, se recomponen incluso en un hermoso vaso tallado y decorado.

¿Ciencia ficción? Es posible, pero de éstas cuestiones se ocupan científicos “serios” Por ejemplo Aurélien Barrau (1) nos dice :

“Este multiverso –si fuera verdadero- supondría un cambio radical en nuestra profunda comprensión de la física. Las leyes reaparecerían como tipos de fenómenos; el precepto ontológico de nuestro universo debería ser abandonado. En otros lugares del multiverso existirían otras leyes, otras constantes, otra cantidad de dimensiones; y nuestro mundo sería sólo una pequeña muestra. Esto podría suponer la cuarta herida narcicista, tras las producidas por Copérnico, Darwin y Freud.” .

Cabe pues suponer que el big-bang, de hace tan “solo” unos cuantos miles de millones de años fue un comienzo local de nuestra “burbuja” de universo. Y que ésta no terminará necesariamente con todas sus partículas desagregadas, oscuras, muertas y frías en el cero absoluto como parecen determinar las leyes físicas que la rigen. Si finalmente se produce la interacción de otras “burbujas” inmersas en el vasto e infinito Multiverso, con leyes distintas y extrañas a la nuestra, nuestras dispersas partículas volverán a “calentarse” y cobrar vida.

Seamos optimistas, Nuestra pequeña burbuja, aparentemente cerrada, entrópica y por ello finita, no es mas que un islote flotando en el Multiverso, abierto, ordenado, eterno e infinito. Y en éste, el hombre, ese pequeño “universo burbuja” bacteriano, buceando y buscando en el infinitamente pequeño y extraño universo cuántico, tal vez logre un día desentrañar todos los misterios si logra alumbrar una Teoría Unificada o teoría del todo.

PATALETE


(1) Aurélien Barrau, es físico del Laboratorio de Física Subatómica y de Cosmología de Grenoble, premio internacional Bogoliuboy para jóvenes científicos por sus investigaciones sobre “los fenómenos cuánticos en las cercanías de los agujeros negros”.La cita es un párrafo del artículo “La idea de múltiples universos es más que una fantástica invención”.