LAS ORGÁNICAS CAUSAS DE LA FALTA DE DEMOCRACIA

Los partidos españoles son hijos del franquismo y herederos de su “democracia orgánica”, jerárquica y disciplinada —del mismo modo, los sindicatos heredaron la verticalidad del Nacionalsindicalismo—. Los partidos practican esa seudo-democracia orgánica en su vida interna, y la proyectan en sus relaciones con los demás partidos para el reparto del poder. Por tanto, los partidos ni siquiera acatan la Constitución que les exige ser internamente democráticos.

A la ciudadanía nos está vedada la participación incluso en ese remedo de democracia, y nuestros derechos políticos se reducen a acudir a las urnas como romeros cada cuatro años. Así es como se asignan los cupos de reparto en el Parlamento, donde los diputados tampoco acatan la Constitución cuando obedecen el mandato imperativo de los líderes de sus partidos.

Orgánicamente, el Parlamento elige al Presidente del Gobierno quien, desde ese momento, detenta un mando verticalista sobre los poderes Ejecutivo y Legislativo. Elegido el Poder Judicial desde el Parlamento, la seudo-democracia "orgánica" se remacha y el Presidente ordena y manda omnímoda e impunemente. Como otro dictador.

Y el pueblo español, en eterna prolongación del franquismo, sigue gracias a este artefacto sin protagonizar su propia Historia.


(NOTA: Las democracias son inorgánicas u orgánicas. En las inorgánicas cada ciudadano interviene en las decisiones públicas a través de su Diputado; en las orgánicas el ciudadano se integra en una corporación y elige al delegado que en una cámara va a defender sus intereses concretos.

En la democracia partitocrática española, degeneración del régimen franquista, las trazas de democracia orgánica se traslucen en las prácticas políticas al margen de la Constitución. La actual Monarquía de Partidos finge ser una democracia inorgánica; pero somete: los derechos individuales, al dictado de las altas finanzas, las corporaciones económicas y, cada vez menos, los sindicatos; y los derechos políticos, a los intereses de los partidos y de quienes los financian.)

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