EXCLUSIVA: ÁCRATAS ENTREVISTA AL DIRECTOR DE LA AGENCIA INTERNACIONAL DE LA ENERGÍA

Nobuo Tanaka hablando del Negro para Ácratas

Pues sí, hemos tenido suerte y bastante enchufe para colarnos en el despacho de Nobuo Tanaka fingiendo ser reporteros de algo llamado Deutscher Ácratas. Vaya si nos han atendido, más de una hora paliqueando con un hombre de 58 años, que parece saber de lo que habla sin duda alguna. Aquí está lo que sacamos. Dejamos que imaginen el resto, lo que nos pasó cuando descubrieron que no eramos periodistas de diario alguno.

ACRATAS: Señor Tanaka, ¿sabe Ud que precio del petróleo pronosticó su organización para el año 2010 en un estudio publicado hace 3 años?
Tanaka: No, en ese tiempo no estaba al cargo, es lo que le puedo decir.
ACRATAS: Pronosticaron 35 dólares por barril.
Tanaka: Pues sí, un patinazo considerable.
ACRATAS: ¿Por qué será que ningún observador del mercado del petróleo hace mucho caso de las estimaciones de la Agencia Internacional de la Energía (IEA) sobre la evolución de los precios del crudo?
Tanaka: Bueno, déjeme que le diga una cosa, la demanda de crudo ha aumentado inesperadamente, China y la India especialmente han desbordado todas las estimaciones posibles con su crecimiento. Al mismo tiempo, la oferta no podía aumentar su capacidad de producción en correspondencia. El resultado es que el mercado se ha ido estrechando hasta el punto actual.
ACRATAS: Vale, pero se podría hacer algo mucho más fácil, dar una información confiable sobre la producción del crudo en vez de cagarla (en inglés suena más suave) metiendo paquetes como sus estimaciones.
Tanaka: Sí, sí, el mercado falla por su falta de transparencia. Sin duda funcionaría mejor de la otra manera. Por eso estamos trabajando en un gran estudio que incluye 700 campos de producción petrolera a lo largo de todo el mundo, que nos va a dar datos sobre la capacidad real de producción sobre la que basar luego nuestras estimaciones. En noviembre tendremos los resultados. Queremos averiguar con qué potencial de producción contamos. Estamos muy expectantes a ver lo que se sale de aquí.
ACRATAS: ¿Cree Ud de verdad que van a sacar datos fiables sobre la producción de petróleo de esta manera?
Tanaka: Esa es una pregunta lógica. Como mínimo tendremos datos sobre los países productores, que no pertenecen a la Opec, por ejemplo de USA y Noruega. Es cierto que muchos otros países mantienen como un secreto de Estado su producción. Ni siquiera podemos echar un vistazo en sus libros para saber lo que tienen. Por eso tenemos que sacar la información por otro lado, como lo hacemos con este estudio y con la información que recibimos de la industria del petróleo y las compañías de servicio relacionadas.
ACRATAS: Hombre, pero esos expertos que ud menciona reciben información de segunda mano que puede llevar a conclusiones erróneas. Por ejemplo los pozos de Arabía Saudí han aumentando su producción, sí; pero a costa de inyectar cada vez más agua a presión, lo que hace aumentar los costes de extracción y reducir sus reservas declaradas.
Tanaka: Naturalmente, ¡qué más quisieramos nosotros que hacer las comprobaciones en el mismo lugar donde se extrae el crudo! Pero ¿qué más podemos hacer? Son estados soberanos los que nos lo impiden .
ACRATAS: Eso significa que la respuesta fundamental a cuánto petróleo nos queda en todo el mundo sólo podrá ser aproximada con un buen margen de error.
Tanaka: Bueno, para que ese margen de error sea lo más reducido posible, la IEA está haciendo predicciones relativas más atinadas. De esta manera, pensamos que hasta el año 2030 sí tendríamos recursos suficientes. El problema está sobre la superficie de la tierra, los países invierten muy poco en sondear nuevos pozos y en la sustitución de tecnología. Esto nos da razones serias para preocuparnos.
ACRATAS: ¿Cuáles serán entonces las consecuencias?
Tanaka: Pues lo estamos viendo, la cantidad de petróleo ofertado está cayendo. Nuestras proyecciones indican que ello va a suponer tener que recortar cada año un 5% de media del volumen de los pozos petrolíferos a lo largo del todo el mundo. Esto significa que necesitaremos anualmente del orden de los 3.5 millones de barriles diarios adicionales, sólo para compensar las pérdidas indicadas. Eso sin contar con el aumento de la demanda, que supone un millón de barriles más al día. Sin duda el mercado se está estrechando a unos niveles muy preocupantes, donde la brecha oferta-demanda es cada vez más amplia.
ACRATAS: ¿Hay un buen cuello de botella, entonces?
Tanaka: Como lo vemos nosotros es que la actual situación puede generar inestabilidad y forzar una nueva subida en los precios. Ahora tenemos, por ejemplo, las noticias de una huelga en Nigeria. Por eso es importante que trabajemos en estrecha colaboración con los productores. Personalmente, suelo estar en contacto cada vez más con el secretario general de la OPEC Abdullah al-Badri y el presidente de la OPEC en Argelia, Schakib Chalil, incluso con el ministro de petróleo saudí, Ali al-Naimi. Para que en caso de urgencia podamos reaccionar con las medidas pertinentes en menos de 24 horas.
ACRATAS: En estas últimas semanas el precio ha cedido, es demasiado temprano para afirmar que hemos pasado lo peor?
Tanaka: Nosotros seguimos manteniendo nuestras previsiones. Es cierto que observamos que la demanda en los EEUU de gasolina ha caido muy significativamente. Al mismo tiempo, Arabia Saudí ha aumentado la producción diaria en 2.5 millones de barriles, ello explica la situación actual con los precios. Nosotros esperamos que en los proximos dos años el mercado esté calmado. Después la situación va a ser mucho más complicada. Un nivel de precios sobre los 20 dólares, como hace una década, jamás los volveremos a ver.
ACRATAS: ¿Descarta entonces una bajada considerable en el precio del crudo?
Tanaka: Vivimos en unos tiempos de alto precio de la energía, y no hay marcha atrás. Si queremos evitar una buena crisis, los paises productores tienen que hacer sus deberes caseros, deben aumentar su capacidad de producción.
ACRATAS: Los barriles adicionales necesarios sólo pueden proceder de los paises miembros de la OPEC, que son los que cuentan, de lejos, con la mayores reservas.
Tanaka: Bueno, sí; ahí está nuestra esperanza. Sólo los paises de la OPEC pueden aumentar significativamente su capacidad.
ACRATAS: La ambición de los Estados del Golfo Pérsico es disponer de sus propias refinerías. De esa manera la región se convertiría no sólo en el número 1 de producción de petróleo, sino que también sería lider de otros derivados como la gasolina y gasóleo. De esta manera reduciría su dependencia de la OPEC y de otros Estados petroleros mayores.
Tanaka: Sí, eso es correcto. Por eso esas inversiones son absolutamente racionales. Muchos países dependientes de la tecnología de Occidente no han modernizado sus refinerías, lo que acarrea un sinnúmero de problemas fatales, ya que deben tratar un petróleo con cada vez mayor cantidad de azufre y otros componentes difíciles en el refinado con tecnología obsoleta. Necesariamente hay que hacer lo posible para que estos países modernicen su tecnología. Ya dependemos de ellos, que pasarán de ser productores del crudo y de los derivados, no implicaría cambio alguno en la situación.
ACRATAS: Ya, ya, pero estos países de democracia tienen lo que un calvo de pelo y con seguridad más inestables que un funambulista borracho.
Tanaka: Precisamente por eso lo tengo por una buena idea, no sólo presionar como demanda a que aumentan su producción, sino a colaborar a que modernicen su economías ayudando a su industria petroquímica que es la fundamental para que todo el resto ruede bien. Algunos como Arabia Saudí están haciendo gigantescas inversiones en energías alternativas, como la solar.
ACRATAS: Ud nos dibuja una imagen muy bonita de estos países ,a pesar de las amenazas de la subida del precio de tíos tan simpáticos como Hugo Chávez y el iraní Ahmadinedschad.
Tanaka: El precio del petróleo es también siempre un precio político. Lo que esos políticos digan puede alterar los precios por un día, pero luego el mercado impone otra realidad.
ACRATAS: Hombre, gracias a los altos precios del petróleo es que se mantienen estos regímenes. Ellos hacen un buen negocio a costa de apretarle las clavijas a la economía de medio mundo. ¿No cree Ud. que esto le está haciendo pupita de la buena a la economía global?
Tanaka: Bueno, para eso se ha acuñado la expresión "Oil Burden" (carga de petróleo). Con esto se mide el impacto del petróleo con relación al Producto Interior Bruto del país. Como se puede imaginar esa carga se ha disparado durante este año, ha superado los niveles de la gran crisis de 1973, muy por encima de la de 1979. Ha hecho mucho daño a economías que, como las de Tailandia o Vietnam, subvencionan el petróleo que tienen que detraer dinero de otros servicios y necesidades básicas.
ACRATAS: Pero estas subvenciones han hecho el impacto de los precios mas suave, ¿no?
Tanaka: Bueno, mire, esto se ve en China que ha tenido que dedicar 40 mil millones de dólares a tales subvenciones. Claro que nosotros no somos amigos de las subvenciones, que al final ayudan a mantener el precio artificialmente alto.
ACRATAS: ¿Dónde cree Ud. que está la diferencia entre la actual crisis y la de los setenta?
Tanaka: En los 70 fueron razones políticas de la OPEC las que motivaron una contracción de la oferta. La actual, al contrario, es por un exceso de demanda. Es un fenómeno estructural el que amenaza a la economía mundial, y por eso debemos buscar soluciones entre todos y en el menor tiempo posible.
ACRATAS: Y, ¿cómo serían esas soluciones?
Tanaka: Bueno, debemos seguir el objetivo de la reducción del CO2, ello ayuda no sólo al clima, sino también a la seguridad energética. En la IEA hemos desarrollado un escenario de haber reducido en el año 2050 la emisión de CO2. Bien, eso implicaría un 27% de reducción en la demanda de petróleo. El instrumento más importante en este escenario es el ahorro energético, debemos aumentar la eficiencia del uso energético. Para eso hay que reforzar el uso de energías alternativas como la solar, eólica e hidroeléctrica, y debemos meternos también con la energía nuclear.
ACRATAS: ¿Qué demanda Ud concretamente?
Tanaka: Para disminuir a la mitad la emisión de CO2 hasta el año 2050, debemos construir anualmente en todo el mundo unas 17.500 turbinas eólicas, 55 centrales de carbón y gas con tecnología que separe el CO2 y lo almacene aparte, y finalmente unas 32 centrales nucleares. Actualmente sólo se construyen dos nuevas centrales nucleares cada año, aunque hubo un tiempo en el que se hacian 30. ¿Por qué no podemos, una vez más, alcanzar esas cifras?
ACRATAS: ¿No será porque el uranio se agotaría rapidamente?
Tanaka: Los colegas de la Agencia que tenemos en Viena nos han asegurado que eso no es problema alguno, tenemos suficiente uranio. El cuello de botella más preocupante para los expertos: los ingenieros nucleares son el bien escaso.
ACRATAS: En España todo esto de la energia nuclear se ve con muchísimo escepticismo
Tanaka: Piense Ud que, sin energia nuclear, no se podrá alcanzar el objetivo de reducción de CO2. Por cierto, ¿cómo que de España? ¿No me había dicho Ud que era reportero de un periódico alemán?